in

Aranceles chinos a tecnología ceden: Estados Unidos alivia presión sobre importaciones.

La reciente decisión de la administración Trump de eximir a ciertos productos tecnológicos clave, como teléfonos inteligentes y ordenadores portátiles, de los elevados aranceles a las importaciones procedentes de China, ha generado un respiro temporal para las empresas tecnológicas y los consumidores, pero también ha suscitado interrogantes sobre la dirección futura de la política comercial estadounidense. Esta medida, que afecta retroactivamente a productos desde el 5 de abril de 2025, pone de manifiesto la complejidad inherente en la relación comercial entre Washington y Pekín y la sensibilidad de ciertos sectores a las tensiones geopolíticas.

El alivio arancelario, que abarca un total de 20 categorías de productos, incluyendo aquellos clasificados bajo el código 8471 – que comprende ordenadores, portátiles y dispositivos de procesamiento de datos – llegó en un momento crítico, justo cuando se preveía la aplicación de aranceles recíprocos del 125% sobre las importaciones chinas. La magnitud de este potencial aumento de costes era considerable, especialmente considerando que los teléfonos inteligentes representaron en 2024 la principal importación estadounidense proveniente de China, con un valor de 41.700 millones de dólares, seguido de los portátiles con 33.100 millones.

Esta decisión de la administración estadounidense no se limita a favorecer a las grandes corporaciones tecnológicas. Analistas del sector argumentan que un aumento significativo de los precios de los dispositivos electrónicos habría repercutido directamente en los consumidores, elevando el coste de productos esenciales para estudiantes, profesionales y empresas. Se estima que el precio de un iPhone de gama alta podría haber superado los 2.300 dólares, en comparación con los 1.599 dólares actuales, una cifra que habría generado un fuerte impacto en el mercado y en el poder adquisitivo de los ciudadanos. De hecho, existen indicios de que empresas como Apple tomaron medidas preventivas en la víspera de la aplicación de los aranceles, llegando a fletar aviones para trasladar iPhones desde India a Estados Unidos.

Sin embargo, el respiro concedido a la electrónica de consumo no debe interpretarse como un cambio radical en la estrategia comercial de Trump. Paralelamente a la exención de determinados productos, la administración mantiene su postura firme en relación con los aranceles del 20% asociados a las importaciones chinas vinculadas al fentanilo, una droga sintética que ha causado una grave crisis de salud pública en Estados Unidos. Además, se ha anunciado una nueva investigación sobre el sector de los semiconductores, lo que abre la puerta a la posible imposición de aranceles adicionales en el futuro.

Esta investigación sobre los semiconductores, un componente crucial en la fabricación de una amplia gama de productos tecnológicos, es especialmente preocupante para la industria. La dependencia de Estados Unidos de los proveedores de semiconductores asiáticos, en particular de Taiwán y Corea del Sur, ha sido identificada como una vulnerabilidad estratégica. La administración Trump ha manifestado su intención de fomentar la relocalización de la producción de semiconductores en territorio estadounidense, pero este proceso requerirá importantes inversiones y un cambio estructural a largo plazo.

La ambivalencia de la política comercial de Trump, que oscila entre la concesión de exenciones arancelarias y la amenaza de nuevas medidas proteccionistas, genera incertidumbre en los mercados y obliga a las empresas a adoptar estrategias de adaptación constantes. La reciente decisión, a pesar de ofrecer un alivio inmediato, está condicionada por la evolución de las negociaciones comerciales con China y por la necesidad de proteger los intereses nacionales en áreas consideradas estratégicas. Por tanto, si bien se ha evitado una subida de precios inmediata en productos de alta demanda como teléfonos y ordenadores, el futuro de la relación comercial entre Estados Unidos y China, y su impacto en el sector tecnológico, sigue siendo incierto.

¿Qué opinas?

Escrito por Redacción - El Semanal

El Semanal: Tu fuente de noticias, tendencias y entretenimiento. Conéctate con lo último en tecnología, cultura, economía y más. Historias que importan, contadas de manera dinámica y accesible. ¡Únete a nuestra comunidad!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

GIPHY App Key not set. Please check settings

Xaba impulsa la inteligencia artificial industrial con inversión de Hitachi y cerebros sintéticos.

Van Dijk lidera renovación ambiciosa del Liverpool ante crucial verano.