Los incendios forestales ponen en peligro a la cuarta ciudad más grande de Turquía; miles evacuados
Las llamas avanzan sin control en el suroeste de Turquía, amenazando la región de Izmir, la cuarta ciudad más poblada del país. Más de 60 incendios activos han consumido miles de hectáreas, obligando a las autoridades a evacuar a residentes de varias localidades. Las altas temperaturas y los fuertes vientos han dificultado las labores de extinción, aumentando el riesgo de que el fuego alcance zonas urbanas.
Los servicios de emergencia trabajan sin descanso con helicópteros y aviones cisterna, pero la magnitud del desastre ha superado los recursos disponibles. Testigos reportan columnas de humo visibles a kilómetros de distancia, mientras hospitales locales se preparan para atender posibles afectados por inhalación de humo.

Las autoridades han pedido calma, pero la situación sigue siendo crítica. "Estamos ante uno de los peores episodios de los últimos años", admitió un portavoz local. Aunque el gobierno ha atribuido parte de la emergencia a las condiciones climáticas extremas, organizaciones ambientales señalan la falta de medidas preventivas como factor agravante.
Mientras tanto, países vecinos han ofrecido apoyo, pero la ayuda aún no se materializa en tierra. La población afectada sigue en refugios temporales a la espera de que las llamas cedan. La prioridad ahora es evitar pérdidas humanas, aunque el costo ecológico ya es incalculable.

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