Kim Kardashian revela por qué abandonó a North West en un hotel de París

La Explicación de Kim Kardashian sobre la Polémica de su Hija en París: ¿Prioridad o Estilo?

Durante más de una década, un episodio en París ha perseguido a Kim Kardashian. En octubre de 2014, una secuencia de vídeo mostraba a la estrella mediática saliendo del lujoso hotel Le Royal Monceau con un llamativo conjunto rosa, mientras su hija, North West, entonces de un año, no aparecía a su lado. Minutos después, la empresaria regresó al vestíbulo para recoger a la pequeña, desatando un escándalo en redes sociales. Las especulaciones fueron tan intensas que, incluso hoy, la polémica sigue generando debate.

Kim abordó el incidente en su momento con una respuesta irónica en redes: "¿De verdad creen que dejaría a una bebé de un año sola en el lobby? Ah, esperen, solo estaba esperando para el check-out, jaja". Según explicó entonces, había salido brevemente para revisar la silla del coche por un problema del día anterior. Sin embargo, este julio de 2025, la también fundadora de SKKN by Kim ofreció una nueva versión: la estética fue la protagonista.

Al republicar el vídeo en sus Instagram Stories, escribió: "Quería lucir el look antes de cargarla… ¡porque su outfit no hacía juego con el mío! ¡No la olvidé!". La revelación dividió a sus seguidores. Mientras algunos celebraron su coherencia: "Esto es pura Kim, jamás cambiará", otros bromeaban: "Como si esa excusa fuera mejor que olvidarla en la habitación".

North West, hoy una preadolescente de 12 años, ha demostrado ser tan mediática como su madre. Desde detener a los paparazzi con un cartel de "STOP" hasta opinar sobre los diseños de Kim para el Met Gala, su personalidad brilla con estilo propio. En una entrevista para Vogue, Kardashian admitió: "Es muy crítica… pero siempre desde un lugar positivo".

Más allá de lo anecdótico, el episodio refleja la presión desmedida sobre las celebridades, especialmente en la crianza. La capacidad de Kim para convertir un malentendido en una reivindicación de su marca —donde la imagen y el negocio son inseparables— subraya su destreza para manejar la narrativa pública. ¿Fue prioridad o fashion first? La respuesta, como su guardarropa, parece estar cuidadosamente calculada.

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