Secuelas del huracán Milton: Cortes de energía y labores de limpieza.

Tras el paso del huracán Milton, los residentes de Florida se enfrentan a la devastación dejada a su paso por la tormenta, que arrasó comunidades costeras, destruyó hogares, inundó calles y dio origen a una serie de tornados mortales.

A pesar de la trágica pérdida de al menos ocho vidas, muchos expresaron su alivio al constatar que Milton no fue tan catastrófico como se temía. El huracán evitó golpear directamente a la densamente poblada ciudad de Tampa y la temida marejada mortal nunca se materializó.

Llegando apenas dos semanas después del devastador huracán Helene, Milton inundó las islas barrera, arrancó el techo del estadio de béisbol de los Tampa Bay Rays y derribó una grúa de construcción.

A medida que continúa la limpieza, más de 2.5 millones de clientes en Florida permanecieron sin electricidad el viernes por la mañana, según poweroutage.us. Sin embargo, la vital industria turística del estado comenzó a regresar a la normalidad, con varios parques temáticos preparándose para reabrir.

La gran cantidad de vehículos se dirigieron hacia el sur el jueves por la noche en la Interestatal 75, la carretera principal que atraviesa el centro del estado, mientras los trabajadores de rescate y los residentes evacuados regresaban para evaluar los daños. En ocasiones, algunos autos incluso circulaban por el arcén izquierdo de la carretera. Camiones cisterna y camiones de combustible pasaban junto con remolques de baños portátiles y una caravana de vehículos de emergencia.

Mientras los residentes regresaban apresuradamente para averiguar si sus hogares habían sido destruidos o salvados, conseguir gasolina seguía siendo un desafío. Las gasolineras permanecían cerradas, incluso en lugares tan alejados como Ocala, más de dos horas y media al norte de donde la tormenta tocó tierra como un huracán de categoría 3 cerca de Siesta Key en el condado de Sarasota el miércoles por la noche.

Natasha Ducre y su esposo, Terry, se sentían simplemente afortunados de estar vivos. Milton arrancó el techo de lata de su casa de bloque de cemento en su vecindario, a unos cuantos bloques al norte del río Manatee, aproximadamente a 45 minutos al sur de Tampa. Regresaron para encontrar el techo de su hogar esparcido en láminas por toda la calle, las vigas de madera que formaban su techo expuestas al cielo. En el interior, el aislamiento de fibra de vidrio colgaba en jirones, sus pertenencias empapadas por la lluvia y llenas de trozos de yeso destrozado.

«Realmente no es mucho, pero era nuestro hogar. Lo poco que teníamos se ha ido,» expresó. «Se ha ido.»

Con los refugios ya no disponibles y el costo de una habitación de hotel fuera de su alcance, planean apiñarse en la casa de la madre de Terry Ducre por ahora. Después de eso, no están seguros.

Mientras tanto, los parques temáticos de Florida, incluidos Walt Disney World, Universal Orlando y SeaWorld, planean reabrir el viernes tras evaluar los efectos de la tormenta.

El Aeropuerto Internacional de Orlando, el más concurrido del estado, indicó que los vuelos nacionales y los vuelos internacionales se reanudarían el viernes, tras reiniciar las llegadas nacionales el jueves por la noche. El aeropuerto sufrió daños menores, incluyendo algunas filtraciones y árboles caídos.

Milton impidió que Simon Forster, su esposa y sus dos hijos regresaran a Escocia como estaba previsto el miércoles por la noche, por lo que disfrutaron de dos días adicionales de sus vacaciones de dos semanas en International Drive en el distrito turístico de Orlando el jueves. Los huracanes parecen seguirles desde que el huracán Ian de 2022 les impidió regresar a Escocia después de otra vacación en Orlando.

«Hay peores lugares donde podríamos estar con dos días extra aquí,» señaló.

Escrito por: Redacción de El Semanal.