Investigadores demuestran capacidad de comunicación de chimpancés desde 1962.

Durante siglos, la humanidad ha enfrentado la realidad de no ser el centro del universo, un golpe inicial dado por Copérnico durante el Renacimiento europeo. Más tarde, Darwin sacudió los cimientos de la historia natural con su teoría de la evolución en la Revolución Científica. Sin embargo, uno de los consuelos que nos quedaba era la idea de ser la única especie animal con lenguaje, según los eruditos. Sin embargo, recientes descubrimientos han puesto en duda incluso esta afirmación.

Un equipo de expertos en lingüística y psicología comparada, liderado por Axel G. Ekström, ha realizado un estudio minucioso sobre antiguos vídeos de chimpancés emitiendo vocalizaciones que se asemejan al sonido de la palabra «mamá». Dos grabaciones en particular, una de Johnny en Florida en 2007 y otra de Renata en un cortometraje italiano de 1962, han sido analizadas detenidamente.

Los investigadores han observado similitudes sorprendentes en el comportamiento de los dos chimpancés al reproducir las palabras, sugiriendo que pudieron aprender a hablar a través de la imitación y el refuerzo por parte de sus cuidadores. Además, se ha confirmado que los chimpancés son capaces de producir las estructuras de sílabas necesarias para articular la palabra «mamá», lo cual requiere una coordinación significativa entre la voz y la boca.

Respecto a las limitaciones en el habla de los chimpancés, se ha planteado la «Hipótesis de Alcaparras-Jurgens», que sugiere que la incapacidad de controlar los órganos del habla se debe al subdesarrollo de las neuronas del lenguaje en los primates. Sin embargo, este estudio desafía esa idea al demostrar que los chimpancés son capaces de reconstruir fonemas humanos, subestimando así sus capacidades vocales.

Estos hallazgos abren un nuevo campo de investigación sobre el lenguaje en primates, que a pesar de estar protegidos, han sido objeto de limitadas investigaciones. Comprender el lenguaje de los simios puede brindar valiosa información sobre nuestra propia evolución lingüística y, en última instancia, sobre nosotros mismos como especie.

En definitiva, este estudio sugiere la necesidad de investigar más a fondo las capacidades comunicativas de los chimpancés, lo que podría arrojar luz sobre la naturaleza del lenguaje humano y nuestra conexión con otras especies en el reino animal. La ciencia continúa desafiando nuestras concepciones preestablecidas y abriendo nuevas vías de exploración en la comprensión de la vida en la Tierra.